Con el mayor estrés financiero de la era Macri, el riesgo país llegó al récord de 2019

Ante la dilación de la recuperación de la actividad económica, la incertidumbre de los fondos especulativos sobre la capacidad de pago de la deuda vuelve al centro de la escena. Ayer, los tenedores de bonos argentinos en dólares se desprendieron masivamente de sus activos e hicieron derrapar su cotización. Así, el riesgo país se disparó…

Con el mayor estrés financiero de la era Macri, el riesgo país llegó al récord de 2019

Ante la dilación de la recuperación de la actividad económica, la incertidumbre de los fondos especulativos sobre la capacidad de pago de la deuda vuelve al centro de la escena. Ayer, los tenedores de bonos argentinos en dólares se desprendieron masivamente de sus activos e hicieron derrapar su cotización. Así, el riesgo país se disparó 2,7% a 803 puntos básicos, el máximo nivel de 2019. Con un creciente estrés en las condiciones financieras locales, que en marzo mostraron su mayor presión desde que Mauricio Macri es presidente, también se dispararon los seguros contra default, que terminaron en el récord de 874 puntos.

El duro lunes para la renta fija argentina confirmó que la aprobación del nuevo desembolso del FMI no garantizará la calma de los mercados. De hecho, preocupó que el reporte del organismo volviera a sostener que la deuda “es sostenible, pero no con alta probabilidad” y que advirtiera que un shock cambiario o un escenario de bajo crecimiento son fuentes de vulnerabilidad. En ese marco, los títulos de deuda en dólares más representativos entre los que cotizan en el extranjero se hundieron hasta 2,1%. Operaron muy ofrecidos desde el inicio de la rueda y, aunque mejoraron algo a media rueda, cayeron u$s1 en promedio para el tramo corto y u$s1,25 para el tramo medio y largo de la curva. El Bonar 2020, el 2024 y el 2025 ya pagan más de 15% anual en moneda estadounidense. En consecuencia, el riesgo país, que mide el JP Morgan, subió otro 2,7% a 803 unidades y quedó a apenas 26 puntos del pico de diciembre pasado.

La dilación de un rebote de la actividad genera dudas sobre la capacidad de pago de la deuda

No es casualidad, entonces, que el spread de los seguros contra default, una cobertura que suele tomarse como indicador de riesgo de cesación de pago, continúe su escalada. Los CDS (por su sigla en inglés) a cinco años treparon a 874 puntos, el pico de la gestión Macri, 40 unidades más que el viernes y 80 más que en año nuevo.

Un informe publicado ayer por Econviews advirtió que en marzo las condiciones financieras locales volvieron a caer y marcaron “el mayor nivel de estrés desde que Macri es presidente”. Pese a la mejora de las condiciones externas producto de las actuales políticas de la Reserva Federal de EE.UU., el Índice de Condiciones Financieras que elabora la consultora de Miguel Kiguel cayó 42,8 puntos en términos interanuales producto de los problemas autóctonos.

“El desempeño local se vio afectado sobre todo por un aumento del spread de los bonos de legislación argentina y extranjera, mayores expectativas de depreciación y una nueva suba del riesgo argentino respecto al emergente”, destacó el estudio. Y agregó: “Los datos de enero y febrero habían abierto una ventana de optimismo respecto a un eventual repunte de la actividad económica no agrícola; la llegada de marzo marcó un muy fuerte retroceso”, un factor que siembra incertidumbre en la capacidad de pago.

Con todo, tanto el dólar (ver aparte) como las acciones tuvieron ayer una rueda levemente positiva. El S&P Merval sumó 1,4% a 33.122 unidades, en una jornada de bajo volumen de negocios. Sin embargo, el asesor financiero Miguel Boggiano advirtió: “La escapada del riesgo país de ayer es un pésimo augurio. Es dinero institucional retirándose con contundencia de Argentina. Difícil que eso no se transmita a las acciones y el dólar en breve”.