Estar junto al otro físicamente, pero extrañarlo día a día en su versión anterior puede ser un sentimiento tan indescifrable como dramático. Sobre esa idea juega Nosotros, un producto de la BBC disponible en Flow que shockea a los matrimonios y los desafía al espejo.
Advertencia al sentarse ante esta ficción británica: atención desde el segundo uno porque ella, Connie (Saskia Reeves) no nos deja acomodar que ya plantea el problema desde la cama: «Douglas, necesito decirte algo: pensé en irme. Se acabó«. No hay titubeos. No se trata de una «confusión o una decisión temporal». Lo tiene bien amasado.
Douglas (un lúcido Tom Hollander) queda atónito. ¿Cómo no vio las señales? ¿O no las quiso ver? ¿Cuándo arrancó la crisis? ¿Hubo crisis? ¿Y si es aburrimiento y no fin del amor? Desde entonces empieza la lucha de él por querer convencerla de que a los cincuenta y tantos el divorcio es un error. Intentará cambiar, ser un marido más divertido, más presente… como si con eso alcanzara…
Hay un cuento de Raymond Carver que nos recuerda cierta atmósfera de la trama, Si me necesitas llámame. Esas instancias finales de una pareja en la que solo hay cenizas, ese tramo último sostenido por la melancolía, cuando el final es un hecho, pero hay que animarse a ponerlo en palabras.
El problema aquí es que una de las dos partes de esta sociedad quiere huir en buenos términos, propone envejecer por separado, pero en una armónica amistad. Cuando llegue el otoño el hijo de ambos, Albie (Tom Taylor) se marchará a la universidad. ¿Y si el nido vacío resignifica los roles? ¿Y si las vacaciones de verano son utilizadas como último salvavidas? Un viaje de a tres -en tren por Europa- funciona como premio consuelo o despedida familiar.
Incomodidad, asfixia, mesetas, tormentas, incompatibilidad de caracteres. Mientras los ex tortolitos nos ofrecen postales de París, Venecia, Bélgica, y de museos, restaurantes, callecitas, también nos hacen un tour por los estados de ánimo, los apegos, los vínculos familiares y los flashback de esa hermosa relación de juventud entre opuestos.
Connie y Douglas y un viaje que podría salvarlos o hundirlos. Esquemático, hombre de ciencia, bioquímico, Douglas tiene tendencia a medirlo todo y una armadura que a lo largo de los seis capítulos va cayendo. Amigo de la idea de que el tiempo no corroe sino que afianza los buenos vínculos, lo da todo en esa resistencia, aunque se dañe. la suya es una titánica empresa, la de reenamorar a su chica en una gira por 12 ciudades «a lo U2» -dice-.
Las dos líneas de tiempo emocionan, el antes y el durante. Todo nace con un truco de la hermana de Douglas para hacerles «gancho» en una cena y la unión lenta de un científico y una artista que parecen no ir a buen puerto resulta un éxito. Pero los años -las décadas- hacen lo suyo. En el medio del relato, una tragedia que los fortaleza como pareja y nos trompea.
Es fácil quererlos y sentir angustia por ellos. El guion despierta ese deseo de que estén juntos por siempre, o al menos ninguno salga herido. Hollander es magnífico como hombre de mediana edad desconcertado y Reeves justa en su rol de señora segura de su necesidad de borrón y cuenta nueva.
Un tour por Europa y por los estados de ánimo.Es cierto que son claramente identificables como una pareja de clase media londinense, pero logran hacerse universales en ese intento por contar las delicias y los sinsabores de la vida de a dos.
Historia basada en la novela de David Nicholls, esta pintura sobre el desenamoramiento y el intento de querer modificarse para contentar al otro aporta buenas lecturas y grandes disparadores sobre las ruinas. No siempre se trata de separarse en medio de un cortocircuito o una guerra. Hay caminos silencioso más complejos .
Los Petersen, como se apellidan, nos muestran el costo de irse, pero también el de quedarse. Una gran balanza que mide el peso del recuerdo y la culpa. Sin moralejas, nos abrirán varios puntos de vista interesantes sobre defender y sostener el amor como algo cambiante. O animarse a la soledad elegida.
Calificación: Muy buena
Género: Drama. Protagonistas: Tom Hollander, Saskia Reeves, Tom Taylor. Dirección: Lisa Siwe. Creación: David Nicholls. Emisión: seis capítulos disponibles en Flow.