El video del asalto en el que el dueño de una distribuidora de productos lácteos de Ringuelet mató a uno de los asaltantes que entró a robar en el comercio quedó incorporado en el expediente en el que se intenta determinar si el propietario actuó en legítima defensa o fue un homicidio en exceso de la legítima defensa.
Las imágenes grabadas por la cámara de seguridad del local, situado en el partido de La Plata, mostraron que el comerciante disparó cuatro balazos contra el ladrón que entró en el local.
Al revisar la escena se determinó que el dueño del local ingresó en el sector de atención al público luego de abrir una puerta corrediza y después de escuchar los gritos de las empleadas que fueron sorprendidas por los asaltantes. Uno de los delincuentes entró en el local y el otro se quedó afuera.
Según quedó grabado en el video, pasaron cinco segundos entre que el dueño del local ingresó en el sector de atención al público y cruzó el umbral de la puerta para poner en fuga al cómplice del ladrón al que le había disparado.
En las imágenes de las cámaras de seguridad quedó registrada la secuencia en la que el comerciante abrió la puerta y pasó junto al mostrador a las 12.41.14 y, luego, comenzó a disparar contra el ladrón que, en ese momento, tomaba mercadería de un exhibidor instalado junto a la puerta de salida.
Durante cinco segundos, el comerciante disparó cuatro balazos contra el ladrón que, aparentemente, estaba de espaldas cuando el dueño de la distribuidora abrió fuego.
El comerciante no alcanzó a disparar al cómplice que estaba en la parte exterior del local. Aunque, en las imágenes quedó registrado que apuntó hacia el lugar en el que estaba el segundo ladrón, pero no abrió fuego.
Los disparos se advierten con claridad en las imágenes de las cámaras de seguridad a partir de los cuatro fogonazos de la pistola que usó el comerciante.
A partir de la revisión de estas imágenes y los resultados de la autopsia y de los peritajes balísticos, el fiscal Alvaro Garganta deberá decidir si mantiene la calificación inicial de homicidio por legítima defensa o la modifica por una figura penal más grave, como homicidio cometido en exceso de legítima defensa.
El hecho en el que el comerciante se defendió de un asalto y mató a uno de los ladrones ocurrió en la esquina de 12 y 520. El asaltante, de 17 años, alcanzó a dar unos pasos y cayó sin vida, en la vereda, después que el dueño del local le disparó cuatro balazos.
Mientras que su cómplice, que estaba armado, según quedó registrado en las cámaras de seguridad de las viviendas vecinas, huyó en dirección a la intersección de 12 y 520. Este ladrón, que hasta anoche no había sido detenido, dejó la moto en la que había llegado en la puerta del local y huyó a pie.
Uno de los ladrones había ingresado en el local y amenazado a los trabajadores, con la intención de apropiarse de las pertenencias de los empleados y la recaudación del comercio.
En principio, el fiscal Garganta decidió dejar en libertad al comerciante, ya que consideró que la muerte del ladrón se enmarca en un episodio de legítima defensa.
“Queda en libertad porque no se justifica la medida de cautela, porque no hay riesgo procesales en esta instancia. Lo que no impide que pueda existir un principio de responsabilidad”, aseguró el representante del Ministerio Público de La Plata, en un contacto con periodistas.
Y agregó que las declaraciones de testigos confirmaron que el menor abatido portaba un arma. Esa pistola fue encontrada cerca del cuerpo y, según aclaró el fiscal Garganta, “la munición no salió”. El peritaje inicial realizado por la Policía Científica bonaerense en el lugar del hecho avalaría la presunción de que el caso podría ser calificado como homicidio en ejercicio de la legítima defensa. Aunque, las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad podrían derrumbar esa primera hipótesis.
De todas maneras, el fiscal detalló que no será definida la carátula del expediente hasta tomarle declaración indagatoria al comerciante. “La calificación la vamos a resolver con las pruebas”, agregó.
El comerciante, cuya identidad no trascendió, que mató al ladrón juvenil, tendrá custodia en su hogar por decisión de la fiscalía, que busca evitar algún acto de venganza de allegados del delincuente abatido. La policía, en tanto, busca al ladrón que se escapó de la escena del robo.