El ajedrez argentino está de fiesta. Candela Belén Francisco Guecamburu se consagró este histórico domingo como campeona mundial juvenil en México. Sí, a los 17 años cumplidos hace poco. Sí, ganando la partida de la última ronda que debía llevarse sí o sí. Sí, con un invicto en el campeonato en el que sumó 8,5 puntos en 11 rondas. La reina del ajedrez americano, quien se había consagrado campeona continental en La Habana en mayo, ahora es la reina juvenil del ajedrez mundial. Y claro que vale la pena celebrar.
Cande es la primera mujer argentina que se convierte en campeona mundial juvenil. Entre los varones, el legendario Oscar Panno lo hizo en 1953 en Copenhague, Carlos Bielicki lo fue en 1959 en Münchenstein y Pablo Zarnicki en 1992 en Buenos Aires. Ganar el título Sub 20 con tres años menos que el tope de edad lo hace más extraordinario aún.
La gran maestra femenina llegó a la última ronda en México con 7,5 puntos, como una de las tres escoltas de la búlgara Beloslava Krasteva, líder con 8,5. La europea jugaba de blancas y a Candela no le servía el empate si quería ser campeona. La adolescente planteó batalla de entrada y se enfrascó en una lucha posicional, sacrificando un peón para tener más espacio en el ataque al rey blanco.
Candela Belén Francisco Guecamburu, campeona mundial juvenil de ajedrez. Foto @davidlladaJusto cuando llegó el apuro de tiempo para el control de las 40 movidas, en la 39° Candela sacrificó su dama por una torre. En lugar de comer de caballo, lo que hubiera llevado a una simplificación de piezas y a un final parejo con torre y tres peones por bando, Krasteva prefirió quedarse con la dama. A partir de ese error, todo se desencadenó a favor de la argentina.
Candela organizó un ataque al rey y la búlgara terminó perdiendo la dama para llegar a un final de de torres y tres peones con un alfil limpio de más para la argentina. Su técnica excelsa le dio el triunfo en 53 movidas.
Pero tuvo que esperar el final de la partida de la mesa 2 para celebrar su título mundial juvenil, porque jugaban la estadounidense Carissa Yip y la india Trisha Kanyamarala. La americana ganó e igualó los 8,5 puntos de Candela. Pero el mejor sistema de desempate consagró a la adolescente prodigio como campeona mundial juvenil.